La inseguridad en Bogotá está tan desbordada que hasta los lugares religiosos y que merecen respeto no se escapan de los ladrones. Así le ocurrió a la parroquia San Juan Diego Norte, ubicada en la carrera 4a con calle 192, en la localidad de Usaquén, donde presuntos delincuentes se metieron a robarse algunos objetos del lugar, según informó Blu Radio.
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Los supuestos ladrones, que eran más de 3, llegaron al sitio en un vehículo a altas horas de la noche de este lunes 27 de noviembre, con el fin de aprovechar la oscuridad y pasar desapercibidos mientras cometían el robo; sin embargo, no contaron con que los vecinos del sector se dieron cuenta de lo sucedido y avisaron a la Policía Nacional, de acuerdo con la emisora.
Dentro de la iglesia ya habían sacado varios amplificadores de sonido, varias imágenes religiosas y hasta el cáliz con el que los sacerdotes entregan la comunión durante las eucaristías. Los presuntos delincuentes pretendían comercializar estos elementos a un precio mucho más alto, según la cadena radial.
“Por otra parte, cuando llegan los uniformados, estos sujetos estaban terminando de sacar los elementos de valor y otro más en la parte externa, quien sería el encargado de avisar la presencia de las autoridades y de ir recibiendo lo hurtado para guardarlo en el vehículo”, señaló el coronel Éder Chacón, de la Policía de Bogotá.
Las autoridades capturaron a tres hombres, quienes fueron llevados a una estación y puestos a disposición de la Fiscalía para responder por el delito de hurto calificado.
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