Todos sus seres queridos la aguardaban en la terminal del aeropuerto de Viru Viru, en Santa Cruz (este). La joven, que descendió del avión en silla de ruedas.

“Estoy muy feliz. Gracias a todas las personas que oraron por mí, es un montón de emociones, y hasta ahora no lo puedo creer”, manifestó en una corta declaración a periodistas.

Conmovida por la situación se dijo “agradecida con Dios por esta nueva oportunidad que me da”.

Madre de dos niños, Suárez agradeció también al pueblo colombiano.

En el accidente, que se produjo el 29 de noviembre en Colombia, murieron 71 de las 77 personas que iban a bordo, entre ellas jugadores y directivos del club Chapecoense de Brasil, así como periodistas.

AFP