Al menos cinco encapuchados irrumpieron en el hogar de ancianos y dispararon de forma indiscriminada una ráfaga de balas con fusiles automáticos contra toda persona que encontraban.

Los atacantes aprovecharon que la calle estaba vacía de viandantes, debido a la coincidencia con la oración musulmana del viernes, para perpetrar su matanza y después huir, agregó la fuente.

Por otra parte, fuentes médicas dijeron a Efe que las cuatro enfermeras fallecidas son de nacionalidad india.

Además, la fuente policial indicó que una quinta enfermera logró salir ilesa del atentado, ya que se escondió en el almacén de medicamentos.

Algunos de los heridos, cuyo número no precisó, se encuentran en estado grave y fueron trasladados a cinco hospitales de la zona.

La residencia, situada en el popular barrio de Al Sheij Ozmán al Faquir, pertenecía a la Fundación Madre Teresa, de la India, y fue atacada, según la fuente de seguridad, por extremistas que la acusaban de proselitismo cristiano.

Se trata de la segunda agresión que sufre esa fundación en el Yemen, después de que en julio de 1998, un grupo de hombres armados atacara su centro de cuidados para discapacitados en la ciudad de Al Hodeida, a orillas del Mar Rojo, donde murieron dos enfermeras indias y una filipina.

Este ataque se une a los cometidos en las últimas semanas contra militares, responsables de seguridad y autoridades políticas en Aden.

Estos sucesos confirman el deterioro de la seguridad que afecta a esta ciudad, elegida como sede provisional del Gobierno yemení desde la huida del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi de la capital Saná el pasado febrero.

El conflicto en el Yemen continúa después de que los bandos rivales concluyeran sus conversaciones de paz el pasado 20 de diciembre en Suiza sin llegar a un acuerdo para un alto el fuego permanente.

Los rebeldes hutíes lanzaron una ofensiva en septiembre de 2014 y controlan gran parte del país, incluida la capital, pese a que desde marzo de 2015 una coalición árabe, liderada por Arabia Saudí, bombardea sus posiciones en respaldo a Hadi.

EFE

 

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