Escrito por:  Redacción Vivir Bien
Oct 3, 2023 - 10:43 am

Todos hemos tenido que decir adiós a una olla que, lamentablemente, se quemó sin posibilidad de reparación. Sin embargo, no todas las cacerolas crujientes son una causa perdida.

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Entonces, antes de tirar esa sartén de hierro crujiente o esa hoja de brownie demasiado dorada, tenemos algunos consejos que podrían mantenerlos en funcionamiento unas cuantas rondas más. 

Con solo unos pocos productos domésticos cotidianos, te sorprenderá lo que un poco de naturaleza (y mucho esfuerzo) puede hacer. Aquí se explica cómo devolverle la vida a esas ollas quemadas. Estos métodos no son tan difíciles de hacer, pero requieren un poco de paciencia y un poco de esfuerzo. ¡Afortunadamente, la recompensa es extremadamente satisfactoria!

Con solo unos pocos productos domésticos cotidianos, te sorprenderá lo que un poco de naturaleza (y mucho esfuerzo) puede hacer. Aquí se explica cómo devolverle la vida a esas ollas quemadas. Estos métodos no son tan difíciles de hacer, pero requieren un poco de paciencia y un poco de esfuerzo. ¡Afortunadamente, la recompensa es extremadamente satisfactoria!

El método del vinagre y el bicarbonato de sodio

Uno de los trucos más antiguos del libro es la mezcla de vinagre y bicarbonato de sodio. Sin embargo, no los estás combinando. Esta vez, les permitirás hacer su magia por separado para eliminar la suciedad y la grasa y restaurar el brillo. Sigue estos pasos.

  1. Mezcla partes iguales de agua y vinagre blanco destilado. Vierta una pequeña capa en el fondo del molde.
  2. Coloca la sartén en la estufa y caliéntala hasta que hierva.
  3. Deja que hierva durante unos minutos y luego vierte la mezcla.
  4. Extienda una fina capa de bicarbonato de sodio en la olla y frote suavemente con un cepillo de cerdas suaves.
  5. Enjuague la sartén para eliminar cualquier residuo restante.

La mayoría de la gente sabe que la combinación de vinagre y bicarbonato de sodio crea una reacción química, pero también puedes usarlos por separado para restaurar superficies.

El método de sal y detergente para platos

Mezclar la textura ligeramente abrasiva de la sal con un detergente suave para platos también puede extraer grasa y suciedad adheridas. Así es como lo manejas.

  1. Espolvorea el fondo de tu sartén u olla con una fina capa de sal. Una combinación de sal molida gruesa y fina funciona mejor.
  2. Tome una pequeña cantidad de agua y una o dos gotas de detergente para platos y frote suavemente la sartén con un cepillo de cerdas suaves.
  3. Enjuague y repita hasta que la sartén esté limpia. Enjuague una última vez para eliminar los últimos residuos.
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La sal es abrasiva pero suave y se disuelve antes de causar un daño real. Es posible que tengas que repetir esto varias veces si la sartén está particularmente quemada.

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