Escrito por:  Redacción Bogotá
Oct 22, 2023 - 10:01 am

Los esfuerzos de Transmilenio y de las autoridades por reducir al máximo el problema de los colados no tendrán éxito si los uniformados que permanecen en las estaciones del servicio masivo de transporte para evitar esa situación no hacen nada para evitarlo.

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La situación resulta más desoladora si al hecho de que a los colados les importa poco o nada la presencia de policías en las estaciones se suma que algunos uniformados se hacen los de la vista gorda cuando ven el ingreso ilegal de esas personas al sistema.

Eso quedó registrado en un video en el que se ve a una policía situada en el interior de una estación de Transmilenio, frente a la cual por lo menos 14 personas (pudieron ser más que pasaron antes de que comenzara la grabación) se meten sin pagar el pasaje.

La uniformada da unos pasos, mira para otro lado y después los observa impasible, mientras algunos de los colados le sonríen. La actitud de la policía corresponde a la de un simple control en algún ingreso en otra parte  para que se haga en orden y con seguridad.

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La forma en que la policía enfrenta la situación no corresponde a la de un riguroso ejercicio de la autoridad mediante el cual, con su sola presencia, pudiera disuadir a las personas para que no se cuelen. No hace ninguna reconvención.

Otra cosa que llama la atención de este episodio es que 12 de las 14 personas que se ven en la colada masiva son mujeres, viarias de ellas bien ataviadas, y otras son estudiantes.

Nada las afana: ni la dificultad para subirse a la plataforma, ni la presencia de la policía que no hace nada para contenerlas. Por el contrario, cuando no le sonríen, la ignoran.

El video, difundido por caliweb, que hasta lo musicaliza para destacar la tranquilidad de todos los actores en esta escena de la vida real, es de verdad elocuente:

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