Cada Año Nuevo Chino viene cargado con la energía de un animal del zodiaco chino, que en el caso del 2023 es el Conejo de Agua y choca con la vibra de 5 signos.

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El año del conejo promete buenas oportunidades para todos, sin duda, pero tendrá algunos retos para unos signos más que para otros. Este año del conejo de agua promete ser innovador, romper esquemas y estructuras, darle alas a los proyectos que tenemos dentro del closet y que no hemos sido capaces de asumir. Se despide el año del Tigre, que fue bastante duro para muchos, y el conejo promete ser bastante más benevolente.

 

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Sin embargo, su energía puede sentirse especialmente fuerte para quienes nacieron bajo años del Conejo, el Gallo, el Dragón, la Rata y el Caballo.

¿Cuáles son los motivos?

Según el sitio YourChineseAstrology.com estas son las razones:

Conejo (1939 – 1951 – 1963 – 1975 – 1987 – 1999 – 2011)

Según el calendario chino, las personas que son del mismo signo del año en curso viven siempre un año desafiante en todos los sentidos. Los nacidos en estos años deben tener mucho cuidado con su salud, y darle atención a todos los aspectos de su vida. Llegarán retos y tendrán dificultades, esto es porque el animal debe crecer, madurar, le llega su momento de encontrarse consigo mismo como si lo hiciera con un espejo. Pueden tener algunas pérdidas y retos en sus relaciones. Para superarlo los expertos dicen que es mejor no ser impulsivos, tomarse las cosas con calma y no actuar sin pensar. Con cautela lograrán salir bien librados.

Gallo (1945 – 1957 – 1969 – 1981 – 1993 – 2005 – 2017)

El Gallo y el Conejo son dos signos incompatibles según la astrología china, y por esto, los nacidos en estos años tienden a vivir períodos difíciles cuando el año en curso es del animal opuesto. Son signos que chocan en carácter, al Gallo le recomiendan tener los ojos abiertos y no confiar en cualquiera, pues puede ser engañado y según el astrólogo Jose Castillo, “será propenso a volverse en contra de sus seres queridos. ¿Qué deben hacer? Permanecer atentos en todo momento, estar tranquilos, ser más cariñosos y evitar cometer acciones inapropiadas o decir palabras hirientes”.

(Vea también: Predicciones de la fortuna del zodiaco chino: ¿qué le depara el año del conejo?)

Dragón (1940 – 1952 – 1964 – 1976 – 1988 – 2000 – 2012)

El Conejo puede afectar al Dragón, aunque no parezca. Según expertos, el Dragón se vuelve radical en el año del Conejo, pueden ponerse susceptibles y vulnerables a las habladurías y por eso afectarse algunas áreas de su vida como las relaciones personales y lo laboral. Si son demasiado quisqullosos y de mal genio podrían generar una separación. Si quieren lograr el éxito deben mantener siempre el lado positivo de las cosas, actuar y no hablar demasiado, no quedarse dándole vueltas a las cosas y siempre que duden: optar por el entusiasmo.

Rata (1936 – 1948 – 1960 – 1972 – 1984 – 1996 – 2008 – 2020)

Según Viaje a China, “de acuerdo con la historia del horóscopo chino, en la competición del Emperador de Jade para decidir los animales del horóscopo, la rata de ingenio rápido le pidió al buey diligente que lo llevara a cruzar el río y saltó antes de que el buey cruzara la línea de meta, por lo que la rata ganó la carrera y se convirtió en el primero de los animales del horóscopo”. En este año, Your Chinese Astrology explica que el signo de la Rata estará sintiendo el “castigo” del Conejo, y que hay falta de empatía entre estas dos energías. Pueden estar a la baja en salud, trabajo y amor. La solución es esforzarse más por ser menos egoístas y tener más empatía por los otros.

Caballo (1942 – 1954 – 1966 – 1978 – 1990 – 2002 – 2014)

Los nacidos en estos años son directos y no paran antes de expresar sus opiniones, no tienen filtro y sienten que esa es la mejor forma de ser. En este año, esta actitud puede ser peligrosa, y según la astrología china, el Año del Conejo implica para el Caballo destrucción, como la Torre del Tarot. Es buena, porque deben caerse las estructuras, pero es difícil y dura de atravesar, deja muchas enseñanzas y los caballos podrían ser los responsables de los desastres. ¿Cómo evitarlo? Ser cautelosos y pensar dos veces antes de hablar.