Justamente, fue en esa ciudad donde sucedió el incidente con el animal. Él y sus compañeros visitaban un zoológico, cuando a Baldwin se le ocurrió la ‘brillante’ idea de meter su mano entre las rejas que lo separaban de varios leones, indicó The Telegraph.

El jugador quiso acariciar el pelaje de uno de los felinos, pero este reaccionó negativamente y lo mordió.

Baldwin, de 29 años, fue trasladado el jueves pasado a un hospital, donde recibió varios puntos de sutura en la herida y un tratamiento para prevenir una infección.

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El entrenador del equipo, Steve Tandy, aseguró al medio inglés que el único culpable del incidente fue el jugador: “Uno no puede darle palmaditas a la cabeza a un león como si fuera un gatito”.

De igual manera, calificó el comportamiento de Baldwin como “estúpido”.

La mordida quedó registrada en un video que luego fue publicado por Andy Good, también jugador de los Ospreys. Allí se ve que Baldwin pudo zafarse rápidamente del animal, por lo que el hecho no pasó a mayores.

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