En un comunicado de prensa, el gigante tecnológico aseguró que hará un “proceso de reciclaje de manera respetuosa con el medio ambiente”, sin embargo, también considera “usar teléfonos móviles reconstruidos o como de alquiler donde sea aplicable”.
A finales de febrero, la prensa coreana indicó que los Note 7, cuyos problemas con la batería habrían sido solucionados, serían vendidos nuevamente en mercados emergentes como India y Vietnam. Sin embargo, pocos días después un portavoz de la marce en uno de estos países aseguró que “esto era incorrecto”, publicó Mashable en su momento.
Samsung ha manifestado en su boletín de prensa que los dispositivos que puedan ser reconstruidos serán relanzados “dependiendo de las autoridades regulatorias y la demanda local”. Por esto, añade la empresa, “los mercados y fechas de lanzamientos se determinarán en su debido momento”.
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La marca surcoreana indicó que el resto de componentes de los Note 7 se reciclará.
Los metales como el cobre, níquel, oro y plata, serán extraídos por compañías especializadas en este tipo de procesos. Lo mismo ocurrirá con los semiconductores y módulos de las cámaras, y estos serán utilizados por terceros para realizar pruebas de producción.
Este comunicado sobre el polémico Note 7 se da tan solo dos días antes del lanzamiento mundial del Samsung Galaxy S8 en Nueva York, el próximo 29 de marzo.
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