WhatsApp es sin lugar a dudas el servicio de mensajería instantánea más importante en la actualidad, pero existió un mundo antes de esta ‘app’ que tal vez los más jóvenes no recuerden o jamás utilizaron: el Windows Live Messenger.
Si bien la tecnología ha avanzado mucho desde aquel entonces, ese chat de PC nos permitía hacer muchas cosas que WhatsApp actualmente no nos deja. El portal Andro4all hizo el recuento de algunas de estas características, que fueron útiles, o simplemente levantarán nostalgia en quienes usaron el ya desaparecido Messenger.
El ‘zumbido’
En aquella época, si alguien lo ignoraba a uno (o lo dejaba en visto), el popular ‘zumbido’ se hacía sentir para molestar a aquella persona. Una cadena infinita de sonidos de alerta inundaba el chat del contacto, hasta el punto de que se desesperara y se desconectara, o apagara los altavoces del computador, con lo que dejaría de escuchar el resto de notificaciones. BlackBerry después copió esta función con el ‘PING’.
Cambiar el estado por la música que se está escuchando
En vez de tener un texto profundo, una parte de la letra de una canción, o algo como “Uuhn TeXtoO EscRyToo Azih” (sí, en serio pasaba), podría configurarse el Messenger para mostrar lo que se estaba escuchando en el reproductor de Windows Media (esto también lo copió BlackBerry).
Se podían enviar indirectas con los títulos de las canciones que uno escuchaba (por ejemplo ‘Ingrata’ de Café Tacuba), aunque también existía el riesgo de que se abriera un video o un audio no apropiado y todo el mundo se enterara. Esas cosas pasaban, en serio.
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Crear atajos del teclado para enviar emojis
Si bien esta función la permiten aplicaciones de mensajería actuales como Telegram y Facebook Messenger, WhatsApp no los reconoce. En aquel momento se podía configurar que al escribir “:)” saliera el emoji de una carita feliz, y así sucesivamente con los demás emojis, y personalizarlos a nuestro gusto con los comandos más usados. Si usted escribe “:(“ en WhatsApp, simplemente enviará los dos puntos y la apertura del paréntesis.
Jugar ‘Buscaminas’
Si definitivamente se estaba muy aburrido, no había de qué hablar y las conversaciones banales no eran lo de uno, simplemente se podría retar al contacto a jugar el popular ‘Buscaminas’ y competir por subir el ego del ganador. No era lo más útil del mundo, pero al menos distraía y gastaba un poco de tiempo libre de las personas.
WhatsApp, por supuesto, no está ni cerca de esto.
Llamar desesperadamente la atención
Cuando nadie le hablaba en Messenger y se sentía demasiado solo e ignorado, un simplemente cambio del estado de conexión de ‘online’ a ‘fuera de linea’ y de regreso al primero le enviaba una notificación a los contactos para que supieran que estabas en Messenger y con la intención de hablar. Si no funcionaba se repetía hasta que eventualmente alguien iniciara una conversación con uno. En serio, eso pasaba. Todos fuimos jóvenes.
Bonus: La mejor imagen por defecto de perfil
La imagen más graciosa, sin lugar a dudas, era el pato de goma que venía como predeterminada en Messenger. Claro, podíamos modificarla, pero muchos la dejaban ahí por el simple hecho de lo absurdo que se veía. Hoy en WhatsApp solo sale una silueta por defecto.
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