Según el informe sectorial del pasado mes marzo de 2017 emitido por la Superintendencia Financiera, la cartera vencida en todas sus modalidades en el sector financiero creció un 25,3%. Esta situación aqueja a miles de familias en los hogares colombianos, que hoy tienen algún tipo de deuda con el sector financiero.

Para evitar caer en un foso sin salida de su cartera de crédito, existe una alternativa que usted puede utilizar a su favor, sin necesidad de entrar en mora, reparar, refinanciar o restructurar y que en la actualidad usted la puede estar habitando.

¿Qué sucede cuando no podemos seguir asumiendo nuestras obligaciones financieras?

Las entidades financieras en su gran mayoría ofrecen opciones para cubrir necesidades de crédito como la compra de cartera, siendo esta la forma más fácil de obtener una disminución de tasa de interés, o en su defecto, bajar el estrés de las altas cuotas de sus préstamos.

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Por otro lado, existen personas que no presentan esta situación financiera negativa, pero necesitan algún tipo de préstamo para obtener recursos económicos adicionales y en la actualidad no cuentan con capacidad de pago, el cual, no es favorable para cubrir el valor de la cuota mensual.

Entrando en contexto, todos conocen el crédito hipotecario como la forma más viable de adquirir una vivienda o un bien inmueble diferente a vivienda.

Por lo anterior, el sector financiero en su afán de seguir conquistando el mercado colombiano, ha desarrollado un sin número de productos para cada necesidad de sus clientes.

Dentro de estos productos encontramos el crédito hipotecario y el leasing, que pueden ser utilizados a su favor para salvaguardar sus finanzas personales con algo llamado “crédito de libre inversión para sustitución de pasivos, con garantía hipotecaria”, o también el llamado “leasiback”.

El crédito hipotecario para libre inversión, con garantía hipotecaria, es la entrega en garantía de su bien inmueble para la adquisición de dinero en libre destino; para la compra de cartera de sus tarjetas de crédito, sus créditos de consumo, créditos de libranza, créditos de vehículo o rotativos; y sirve también para remodelación de su bien inmueble.

En muchos casos, con tasas de interés viables para su bolsillo, que se puede solicitar en UVR o en pesos, y con plazos desde los 5 años hasta los 20 años.

En el caso del leasiback, es una operación no tan conocida en Colombia que puede llegar a ser muy útil en caso de que el bien inmueble no tenga ningún tipo de garantía vigente, pues esta podrá incurrir en altos costos de trámite para el usuario. La operación de leasiback es muy similar al leasing, pero a la inversa.

El propietario del bien, lo vende a una agencia de leasing para la suscripción de un contrato de arrendamiento sobre el mismo, donde el vendedor obtiene una fuente de dinero y a su vez asegura la recuperación futura del inmueble. La titularidad se trasmite a la sociedad de leasing, manteniendo el vendedor los derechos de uso sobre el mismo, beneficiándose también de ventajas fiscales a través de la desgravación de intereses.

Estas dos alternativas, podrán salvar su afán económico, siempre y cuando cumpla con las políticas sujetas por la entidad financiera, y también usted pueda demostrar que podrá cumplir la meta del pago de sus cuotas. Pero recuerde, el ahorro de sus recursos siempre impactara de manera positiva su bolsillo, pues, no hay dinero más costoso, que el que no se tiene.

Si desea una asesoría financiera en el área de crédito, no dude en contactarme.

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