“La Policía nos estaba esperando, 3 patrullas se dedicaron a perseguirnos por más de 20 minutos para impedir que Los ángeles de la noche repartieran 400 comidas (400 sopas, 400 aguadepanelas, 400 panes) para habitantes de calle”, dice Paola Realpe, la denunciante de la organización.
Realpe aseguró que incluso hubo palabras discriminatorias contra esa población vulnerable: “Además de referirse a ellos de una manera muy miserable, como diciendo que son la escoria de la sociedad, cuando lo que yo veo son seres humanos”.
La coronel Sandra Mora, directora de Derechos Humanos de la Policía, defendió la existencia de controles a la luz del Código de Policía.
“El Código Nacional de Policía nos da unos parámetros de regulación y todo debe estar acompañado. En ese orden de ideas, sí debe ser un poco más controlado toda vez que hay unos factores de riesgo no solo en temas de seguridad sino de salud pública”, dijo Mora Blu Radio.
Mora explicó que los riesgos de seguridad y salud pública se derivan de la existencia de aglomeraciones, definidas como la reunión de más de 10 personas.
“El hambre genera multitud y la multitud, si no está regulada, puede presentar los inconvenientes”, dijo Mora.
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Dado que Los ángeles de la noche es una organización con trayectoria, no se entiende que la notificación de la existencia de reservas sobre la entrega de alimentos y la aglomeración se tuviera que hacer con una acción de fuerza, y no con un contacto previo o una acción pedagógica coordinada entre las 2 entidades, la Policía y Los ángeles de la noche.
Llama además la atención que quien respondió la queja de la organización sea una de las responsables del tema de derechos humanos en la Policía, y que una acción como la presentada puede ser fácilmente interpretada como una violación a esos derechos.
Para Realpe, es obvio que cuando se reparten alimentos se presente una aglomeración.
¿Por qué la Policía, en lugar de reprimir, no contribuye a que la entrega sea más ordenada en coordinación con Los Ángeles de la noche?
La gran ironía es que el diálogo y la coordinación entre la ONG y las autoridades, que se ha debido hacer antes, se hará solo ahora, después del incidente.
Realpe “confirmó a Blu Radio que sostendrá una reunión con miembros del Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (Idipron) para coordinar las futuras entregas de alimentos, que tradicionalmente se hacen los viernes en las noches”.
La Policía no respondió las acusaciones sobre los calificativos discriminatorios de la Policía a esa población vulnerable.
En seguida, el video difundido en Twitter y en el que Paola Realpe hace la denuncia.
Tristeza de Paola Realpe de Ángeles de la Noche , quien no pudo entregar comida a los indigentes de Bogotá, la policia lo impidió.@rcnradio pic.twitter.com/djx5kE0VMi
— Esperanza Rico L (@EsperanzaRicoL) September 12, 2017
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