Lance Gómez fue asesinado en la madrugada de este lunes en un ataque perpetrado, al parecer, por guerrilleros del Eln a la base de la patrulla del Escuadrón Móvil de Carabineros y antiterrorismo, en la hacienda La Emperatirz, en la población de Caloto (Cauca).

Así lo confirmó la Policía Nacional en un comunicado, en el que señala preliminarmente a “subversivos pertenecientes a la compañía ‘Milton Hernández Ortiz’ del Eln”. El uniformado se encontraba de centinela en la base cuando se registró el hostigamiento, en el que resultó impactado en el cuello.

“Los subversivos luego lo despojaron de su arma de dotación y de sus visores nocturnos”, agrega el comunicado oficial.

Lance Gómez era oriundo de Ayapel (Córdoba), tenía un hijo de un año y cuatro meses y unas 20 felicitaciones en su hoja de vida gracias al trabajo que adelantaba con la comunidad.

Además del mensaje de apoyo para la familia del patrullero que envió el director de la Policía, general Jorge Nieto, la institución pidió a la ciudadanía en Cauca “que ayude a dar con el paradero de los criminales”.

Hasta el momento no se habla de recompensa ni de pistas de los señalados subversivos.

El asesinato de este patrullero se suma al del comandante de la Policía en Teorama (Norte de Santander), que fue atacado por un francotirador el pasado viernes cuando adelantaba labores de patrullaje en esa zona.

Las autoridades ofrecieron 50 millones de pesos de recompensa para quien ayude a identificar a los agresores, ya que en la zona en donde se presentó el ataque hay evidencia de que delinquen guerrilleros del Eln y miembros de la banda de ‘Los Pelusos’.

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La serie de atentados contra la Policía se recrudeció este fin de semana por cuenta del estallido de un carro cargado con explosivos, en la población de Pailitas (Cesar), en el preciso instante en que dos patrullas motorizadas adelantaban un procedimiento de inspección.

En la acción terrorista resultaron heridos de gravedad un policía y tres civiles. Infortunadamente, otro civil que cruzaba por el sitio murió.

Además, el sábado en la mañana fue atacada con armas de largo alcance una patrulla en la que se movilizaba el coronel Néstor Pineda, comandante del distrito 10 de la Policía, y un patrullero que lo escoltaba. Los dos uniformados lograron resistir el ataque hasta que recibieron apoyo.

“Ambos fueron trasladados a la Clínica de la Policía en Medellín y, por fortuna, están fuera de peligro”, manifestó a El Colombiano el comandante de la institución en Antioquia, coronel Wilson Pardo.

La principal hipótesis que maneja el oficial es que el atentado sería una retaliación por la captura del segundo cabecilla del ‘clan del Golfo’ en esa región, conocido como Daniel Robledo Roa, alias ‘Negrito’.

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