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Si bien Villazón se refirió a los jefes de los tres entes de control (hace causa común con Fiscal y Procurador) y la columnista solo a dos de ellos (el fiscal Néstor Humberto Martínez y el procurador Fernando Carrillo), en contextos diferentes, hay un denominador común que hace que la pregunta que encabeza este artículo les concierna a todos: las investigaciones por la corrupción de Odebrecht.

Maya se refirió al tema en Valledupar, en el foro ‘El Cesar frente a la corrupción’, en donde dijo que la multinacional brasileña ahora es tema de financiación de campañas políticas. “El Fiscal habló de las campañas presidenciales. La política no es para gente pobre. La política es para gente muy adinerada. Son incalculables los costos de las campañas políticas. Con esos costos de las campañas políticas, ¿cómo se depura la política?”, dijo el Contralor, como quedó registrado en un video del diario El Pilón, organizador del foro.

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Pero después de eso, soltó las perlas que llamaron la atención del país político: “Ningún candidato puede tener su boleto asegurado a la Presidencia de la República, por las investigaciones del caso Odebrecht. Yo creo, sinceramente, y aquí lo digo pal país, los jefes de debate del próximo presidente de Colombia son el Procurador, el Fiscal y el Contralor, con todo lo que vamos a destapar de aquí pa’lante, y lo que hemos destapado”.

“No hay posibilidad ninguna, hoy, que haya alguien predestinado para ser presidente de Colombia”, añadió a su advertencia el Contralor. “Eso va a salir del profundo debate que va a haber sobre la corrupción, y el pueblo va a decidir en las urnas, no sé cómo, cuál es el próximo destino de Colombia, porque esto va a llegar a unos límites en donde va a ser incontenible”.

Las declaraciones de Villazón se producen apenas dos días después de las del Fiscal y el Procurador en las que anuncian sus acciones en el escandaloso caso de corrupción. Pero las tres tienen el mismo estilo.

Las intervenciones del Fiscal y del Procurador le dejan dudas a la columnista Cecilia Orozco: “Sale el fiscal Martínez con su aire de dueño de los destinos de los demás y suelta un pedacito del escándalo […]. Se deja sentir el procurador Carrillo […] con citaciones estruendosas. Un par de días después, el fiscal vuelve al plató y añade una dosis de nombres de bandidos mezclados, para lograr un efecto más dramático, con los de personas que gozan de buena reputación y quienes quedan, irremediablemente, compartiendo picota con los primeros. Y responde el procurador, ansioso, con el aviso de una diligencia a una figura famosa…”.

Orozco agrega que, después de eso, se reinicia “el ciclo de primeras páginas, extras, exclusivos y últimas horas con Martínez y Carrillo en el rol de figuras centrales de la película de moda: la lucha contra la corrupción”. En este sentido, y en el caso de Villazón, llama la atención la forma en que, por ejemplo, Noticias Caracol, medio nacional que reprodujo su intervención en Valledupar, la magnificó y amplificó al calificarla de “durísima advertencia” y “explosivas declaraciones”.

“Néstor Humberto Martínez y Fernando Carrillo protagonizan el papel de visitantes de otro planeta, incontaminados, nada que ver con lo que ha ocurrido en la esfera del poder de la que han gozado durante años de años”, continúa la columnista de El Espectador, para desembocar en su planteamiento central: “Señores fiscal y procurador: no apuntalen sus aspiraciones presidenciales con los procesos que tienen en sus despachos. La justicia al servicio de futuros objetivos electorales: ¡solo eso nos faltaba!”.