“¿Quién se va a quedar con el negocio de la aplicación que reemplaza taxímetros?”, preguntó Hugo Ospina.

Haciendo un símil con la compra de terrenos por los que alguien, con acceso a información privilegiada, sabe que va a pasar una avenida, Ospina sugirió que detrás de la iniciativa hay un negociazo.

“Y lo que más me preocupa a mí es que no hay sino una aplicación habilitada para poder operar a partir del primero de agosto. Entonces, ¿qué va a pasar con las otras que no están habilitadas?, pregunto… ¿Hay que mirar con cuidado a quién se le está haciendo el negocio, socio”, dijo en una entrevista con RCN Radio.

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Ospina aseguró que solo participó (como representante de los taxistas) en 3 reuniones durante el último mes, de un proceso que se viene gestando hace rato.

“Todo lo que se haya hecho en esos 14, 15 meses hacia atrás el gremio de taxistas lo desconoce”, dijo.

Ospina explicó su ausencia de las reuniones por los –supuestos- nexos del secretario de Movilidad Distrital, Juan Pablo Bocarejo, con la plataforma Uber.

“El señor Secretario les hizo los estudios a los señores de Uber y yo tuve una serie de ‘confrontamientos’ con el señor Bocarejo (transcripción textual)”, dijo Ospina.

Para Ospina, no es la Administración Distrital sino la Superintendencia de Industria y Comercio la que decide qué tipo de dispositivo se usa para fijar la tarifa, según el decreto ley 1471 del 2014.

Además, agregó, que el Código Nacional de Tránsito dice que para operar en Colombia todo taxi debe tener un taxímetro (no habla de aplicación).

En medio de un discurso disperso (empezaba con un tema y terminaba con otro), Ospina hizo en RCN Radio otras críticas puntuales al funcionamiento mismo de la aplicación.

Por ejemplo, criticó la existencia en la aplicación de un cargo por congestión en lugar de una tarifa dinámica, lo que –cree- los pone en desventaja frente a las plataformas ‘ilegales’.

Obviamente, según él, habrá una diferencia entre la tarifa anunciada al inicio de la carrera y la final con el cargo por congestión, cuando esta se presente.

“La aplicación le da el valor del punto A al punto B, pero si la velocidad del taxi disminuye a menos de 35 km por hora, la aplicación le va a cobrar el 10 o 12% como mínimo al usuario. Las demás plataformas le dicen a usted de aquí a Unicentro le cuesta tanto, y así haya trancón, no le modifican el valor… Nosotros necesitamos claridad para los usuarios. Y no queremos estar a merced de la competencia, que sí le va a fijar un valor acertado (al usuario)”, dijo.

Ospina también criticó que a los taxistas les vaya tocar asumir los gastos del paquete de datos y de la tableta que debe estar colocada en el espaldar de la silla del copiloto del taxi, aunque le fijó un valor exagerado de un millón y medio de pesos, valor que –dice- terminarán pagando los taxistas asalariados.

Ospina citó experiencias internacionales, como Nueva York o México, anticipando que la experiencia podría fracasar y habría que volver al taxímetro… incluso con (y esto lo decimos nosotros) con ‘muñeco’.

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