Desde que el confeso asesino de la niña Yuliana Samboní fue internado en una unidad especial de ese penal, ha sido muy poco lo que se conoce de su estadía. Pero según dice Las 2 Orillas, ese patio es “uno de los más cómodos y seguros” que tiene la cárcel, pues allí se encuentran varios extraditables y procesados por descalabros financieros.

Ahora, según ese medio, se conoce que aunque Uribe Noguera evita el contacto, el recluso Carlos Andrés Méndez Gómez se ha convertido prácticamente en su confidente, pues es el “coordinador de derechos humanos” del patio y, aparte de los guardianes, el único que “conversa” con él.

“Rafael Uribe recibe llamadas frecuentes de su mamá, María Isabel Noguera de Uribe, sin que siempre reaccione de buena manera”, agrega el portal noticioso.

Méndez Gómez está preso desde 2015 y es uno de los involucrados en el desfalco de la firma inversionista Torres Cortés, que, según dice la Fiscalía, “habría registrado una captación masiva y habitual por más de 115.000 millones de pesos a cerca de 320 personas”.

Méndez fungía como “intermediario” en la comisionista y tras varios incumplimientos a las citaciones de la Fiscalía se dio la orden de captura. Ahora, responde por delitos de “captación masiva y habitual de dineros en concurso homogéneo con los delitos de no devolución de dinero, estafa agravada en la modalidad de delito masa, administración desleal, ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio”, entre otros.

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