La madre, de 18 años, falleció por un disparo en la garganta, en la tarde de este domingo. Aunque llegó con vida al mismo centro médico, los doctores solo lograron salvar al bebé, informó Noticias Caracol.

El lamentable hecho ocurrió en el interior de un inquilinato, en el centro de la capital antioqueña. Según las primeras hipótesis de la Policía, la mujer embarazada se habría ocasionado la herida por problemas personales.

Lo anterior lo confirmó el comandante de la Policía del Valle de Aburra, coronel Juan Carlos Restrepo, citó Caracol Radio:

Se pudo establecer que se trató de un suicidio, de acuerdo con las versiones del compañero sentimental y de otras personas que habitan en la residencia donde ocurrieron los hechos”.

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El oficial también mencionó que “se constató que había un tatuaje en la herida de la mujer, lo cual indica que el disparo fue muy cerca y no fue cometido por alguien más”.

Aunque en un comienzo, algunos medios informaron que la joven había sido asesinada por su compañero sentimental y padre del niño, la Policía desmintió esta versión.

Además, Tele Medellín mencionó que dos personas habían sido capturadas por tener una presunta relación con el hecho.

Por ahora, los médicos del centro asistencial no han manifestado cómo avanza el estado de salud del pequeño.

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