Esas imágenes, captadas por cámaras de seguridad del sector de la carrera 30 con calle 42, en la localidad de Teusaquillo, son analizadas por los investigadores desde el domingo pasado en la noche, cuando Campo Kurmen, de 37 años, fue atacado para robarle su teléfono celular y una cámara de fotografía, informó en ese momento La Cariñosa.

Los señalados asesinos son dos hombres negros, de acuerdo con las declaraciones del coronel Pedro Abreo, oficial de Inspección y Vigilancia de la Policía Metropolitana de Bogotá, a esa misma emisora, que detalló que Campo Kurmen fue llevado malherido a un centro hospitalario, en donde falleció en la madrugada del lunes festivo.

Ese centro asistencial fue la clínica Méderi, precisó el coronel Yordi Malagón, comandante de la Policía de Teusaquillo, en El Espectador. El oficial también agregó que Campo Kurmen estaba con su pareja y ambos se bajaron de la estación de Transmilenio a eso de las 10:00 p.m. “Fueron sorprendidos por dos delincuentes que lesionan al señor”, dijo.

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El Tiempo recoge las declaraciones de Marcelo Rozo, amigo de Campo Kurmen, que dijo: “Cuando me enteré de la noticia pensé que había muerto ahogado en un río o que se había caído de un árbol o lo había picado una culebra. Nunca pensé que fuera a terminar su vida asesinado en una calle de Bogotá”.

Rozo también recordó en el diario que ambos estudiaron en el colegio Cafam y que Campo Kurmen empezó su carrera de Biología en la Universidad Nacional “porque su papá vivía en una montaña en Sesquilé, Cundinamarca, y desde pequeño tuvo contacto con el bosque”.

Agregó que Campo Kurmen creó con un hermano la empresa Albura, dedicada a elaborar joyas a partir de maderas exóticas que obtenía de los bosques en los que trabajaba y hacía investigación.

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