La revelación está contenida en un extenso perfil del general John F. Kelly, que fue por 3 años cabeza del comando sur de Estados Unidos, hasta su retiro en 2016, cuando fue nombrado por Trump jefe de gabinete.

La conversación se produjo semanas antes de que la Casa Blanca públicamente anunciara en septiembre de 2017 que estaba considerando seriamente “etiquetar a su aliado más cercano de América Latina como una nación que ‘no logró’ cumplir sus obligaciones antinarcóticos internacionales”, dice The Washington Post.

Kelly fue visto por el gobierno colombiano como un amigo cuando fue nombrado por Trump en la Casa Blanca, por eso -dice el periódico- el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, quedó “atónito” con el pronunciamiento de la Casa Blanca.

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“La amenaza hundió las relaciones con Colombia a su punto más bajo en años. Funcionarios de Bogotá que habían elogiado a Trump por elegir a Kelly no podían creer que su amigo permitiera que Colombia fuera humillada públicamente de esa manera”.

De acuerdo con un exfuncionario de Estados Unidos con conocimiento directo del episodio, fue Kelly quien convenció a Trump para que no criticara a Colombia en términos “aún más contundentes”, dice The Washington Post.

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