La aeronave tuvo que tocar tierra antes de tiempo, exactamente en el aeropuerto Khartoum, de Sudán, luego de que fuera hallada una red de Wi-Fi con el nombre “bomb on board” (“bomba a bordo”), informa Indy 100.

Por fortuna, el hecho no pasó del susto. Los encargados de seguridad revisaron a todos los pasajeros que iban en el avión y sus respectivos equipajes. Al asegurarse de que no había ninguna amenaza, el vuelo fue reanudado sin muchos más inconvenientes.

Turkish Airlines entregó un comunicado en el que algunos expertos consultados indicaron que la red fue creada por alguien a bordo. También hizo énfasis en que no hubo algún otro tipo de irregularidad. No está claro si el autor de la pesada broma fue identificado ni si se inició algún tipo de proceso en su contra, agrega News.com.au.

El artículo continúa abajo

Este no es el único caso en el que el nombre de una red de Wi-Fi causa polémica. Hace algunos días se conoció el caso de otra red de ese tipo, en un hospital en España, que llevaba el cruel nombre de “Muérete”. Lo curioso es que ni siquiera las autoridades del hospital sabían quién le puso el nombre.

LO ÚLTIMO