“El presidente actual fue vicepresidente SEIS AÑOS, ¿por qué no denunció entonces las “muchas irregularidades” que ahora insinúa?”, cuestionó Correa en su cuenta de Twitter, medio que ha elegido para cuestionar muchas de las medidas que viene aplicando el presidente Moreno.

El exmandatario añadió que “esto realmente es canallesco” y “una verdadera puñalada en la espalda a los que arriesgamos hasta la vida luchando contra la corrupción”.

Moreno informó el viernes pasado al país en cadena nacional de radio y TV que la deuda pública de Ecuador supera los 41.000 millones de dólares, y se ha pasado del límite legal del 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), estimado en 100.000 millones de dólares.

A ese endeudamiento se suman otros pasivos del Estado por algo más de 17.000 millones de dólares.

Correa insistió por Twitter que la administración actual conocía “perfectamente todas las cifras de deudas y pasivos”, por lo que “hacer una cadena nacional para “anunciar” lo que siempre supieron es tan solo parte de un show”.

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Moreno sostuvo que decisiones económicas del Gobierno de Correa no fueron debidamente aquilatadas y pusieron a la economía nacional al límite de su sostenibilidad.

El exmandatario se defendió, asegurando que “pese a que tuvimos que enfrentar los más graves problemas económicos y naturales de la historia reciente salimos adelante, sin paquetazos, sin incremento de pobreza ni desigualdad, sin atrasarnos un solo día en sueldos y salarios”.

“En bonanza lo hicimos bien, en dificultades, aún mejor”, agregó Correa, quien desde el pasado 10 de julio reside en Bruselas.

Para Correa, “el mundo entero” reconoce sus logros económicos y consideró que comparar en términos absolutos la deuda de un país con 40.000 millones de dólares de PIB en 2006, “con el país de ahora, con más de 100.000 millones de dólares del PIB, es absoluta mala fe”.

En un texto de cuatro páginas que publicó en Twitter, Correa añadió que “hemos tenido lobos disfrazados de corderos” cuya consigna es “destrozar todo lo que huela a Rafael Correa (y) destruir la verdadera revolución”.

Por ello pidió a sus seguidores “no desalentarse” y “resistir” pues “todo lo cínico, desleal y mediocre, será efímero”.

Moreno, vicepresidente de Correa entre 2007 y 2013, asumió la presidencia el pasado 24 de mayo y desde el inicio de su mandato marcó diferencias de gestión y de tono con su sucesor, exponiendo rupturas internas en el partido gobernante Alianza País.

Sputnik

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