Ello significa un paso más hacia el histórico sueño de muchos parisinos. En 1988, el expresidente francés Jacques Chirac, que entonces era alcalde de París, prometió que los capitalinos podrían bañarse en el río que cruza la ciudad “dentro de 5 años”.

Prometió entonces que haría todo lo posible para convertir al Sena en un “un río limpio”, aunque finalmente nunca llegó a darse un chapuzón.

Este martes, muchos años después, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, inauguró oficialmente tres piscinas de un total de 100 metros de largo dentro del estanque de La Villette, que cruza un concurrido parque del noreste de la capital.

El artículo continúa abajo

Hasta el 10 de septiembre, niños y mayores, hasta un máximo de 300 personas, podrán bañarse simultáneamente bajo la supervisión de un equipo de socorristas.

“Una experiencia de baño natural, sin tratamiento químico o biológico”, promete la alcaldía de París.

El agua del estanque proviene del canal del Ourcq, recuerda Jean-François Martins, responsable de Deportes del ayuntamiento, y tiene filtros que evitan la llegada de hojas, desechos sólidos y peces. También dispone de varios captores para controlar diariamente la calidad del agua.

“El estanque de la Villette es una primera etapa, la siguiente será el lago Daumesnil, en el parque de Vincennes, en 2019. Y luego, en 2024, si ganamos la organización de los Juegos Olímpicos, nos podremos bañar en el Sena”, prometió Martins.

Con la apertura de esta piscina, París da un paso hacia el sueño de muchos de bañarse en el Sena, cuerpo de agua que está muy contaminado.

Desde una ordenanza dictada en 1923, está prohibido bañarse en el Sena bajo amenaza de una multa de 11 euros, recuerda la Prefectura de policía de París.

AFP

LO ÚLTIMO