Los videos, registrados por la ONG Scorpion Wildlife Trade Monitoring Group en el Zoológico de Bandung, Indonesia, muestran a varios osos pidiendo comida a visitantes del recinto, y a uno de ellos consumiendo su propio excremento.

Gunung Gea, director de programas de la organización defensora de animales, dijo a BBC que es evidente que ellos viven en malas condiciones. “El recinto es sucio, no tiene césped ni arboles, y el agua está contaminada”, indicó.

Asimismo, Gabriella Fredriksson, vocera de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, afirmó al medio que ellos están famélicos por fallas en su alimentación. “Definitivamente, el hecho de que se les vean las costillas no es normal. Están desnutridos”, señaló.

Para proteger a los osos, la ONG, que les ha hecho seguimiento en los últimos meses, está promoviendo una petición en Change.org que busca que el zoológico sea cerrado y los animales que habitan allí sean trasladados a un santuario capaz de cuidarlos.

Sin embargo, el recinto se defendió de las acusaciones y desmintió que haya deficiencias en su alimentación. “Les damos suficiente comida… La gente dice que están flacos, ¿pero eso significa que no están saludables y que no están comiendo? No”, manifestó un vocero al portal.

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