A su regreso del país, Rodman dijo que si bien es posible “ver algo de pobreza” allá, asegura que la mayoría del país es “civilizado” y que la gente vive “muy feliz” bajo el control de Kim Jong-un, el líder de la nación con quien el estadounidense mantiene una cordial amistad, informa Newser.
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El problema, dice el exdeportista, es que la gente no se fija en el lado bueno de ese país. Además, aseguró que desde la última vez que la había visitado hasta ahora, Corea del Norte se ha modernizado mucho y ha habido muchos cambios, agrega ABC News.
De igual manera, Rodman afirmó que su visita produjo buenos frutos, ya que el mismo día que él pisó suelo norcoreano, el gobierno de ese país liberó a Otto Warmbier, un estadounidense que estaba preso desde hacía más de un año por tratar de robar un afiche de propaganda.
A pesar de eso, el Departamento de Estado de Estados Unidos y la familia del preso, que falleció pocas horas después de llegar a su país, dicen que Rodman no tuvo nada que ver en la liberación.
No obstante sus declaraciones y la buena voluntad que muestra para que Estados Unidos y Corea del Norte tengan relaciones amistosas, a muchos de sus compatriotas les ha molestado la cercana relación que él tiene con el régimen norcoreano. De hecho, muchos han pedido que se retire su nombre del Salón de la fama del baloncesto. Al menos 1.600 personas han firmado la petición.
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