La nota de despedida que le encontraron en su maleta decía: “Chau mierdas”, después de que la joven se disparó en la cabeza con un revólver calibre 38, señala el portal TN.

Cuenta el medio que los alumnos de cuarto año del Colegio Nacional Rafael Hernández de la Plata, en argentina, estaban en plena clase de geografía cuando la suicida le subió el volumen de forma inesperada a la música de su celular. En el momento en que profesor y estudiantes voltearon a mirar, vieron cuando la chica extrajo el arma de su mochila y se disparó, sin que nadie tuviera tiempo de reaccionar, informa Ámbito.

Pese a la gravedad de la herida causada por una bala tan grande como lo es una de este calibre, reporta La Nación, la joven se salvó por la rápida intervención de los paramédicos que la atendieron a tiempo para salvarle la vida, aunque el pronóstico de su estado de salud es reservado, luego de ser inducida a un coma y de haber sido operada para extraerle el proyectil.

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Según Minuto Uno, un juez ordenó suspender las clases en el colegio mientras los expertos forenses recopilan evidencias para tener más información sobre este caso.

Un comunicado del colegio difundido por La Nación dice: “Se trata sin dudas de un hecho que nos llena de conmoción y golpea a toda la comunidad educativa y especialmente a sus compañeros. Por ello, desde el Colegio Nacional estamos trabajando para ofrecer la mayor contención a los alumnos frente a esta situación particularmente traumática”.

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