La mujer dijo que se desató un caos absoluto cuando ella estaba encerrada en una tienda en Las Ramblas después de que la camioneta arrollara a decenas de personas en el paso peatonal, dijo en una entrevista para la estación de radio australiana 3AW.
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Pocos segundos después, dijo, todos los que estaban cerca de ella estaban corriendo por sus vidas hacia la parte de más atrás de la tienda, lejos de las ventanas, agrega Independent.
La australiana le dijo a 9 News:
“No vimos la furgoneta, solo podíamos ver la multitud y la policía y algunas personas que claramente veían que algo terrible había pasado. Veíamos a cerca de 200 personas agolpadas en la plaza. De repente, todos afuera empezaron a gritar. La gente estaba tratando de entrar a la tienda”.
Según el testimonio de Monaco, además de Barcelona, ella también estuvo en Londres el pasado mes de junio cuando ocurrió un ataque en London Bridge, una zona de bares en la capital británica, que dejó un saldo de 7 personas muertas y 48 más heridas.
De igual manera, 3 días después estaba en París, el mismo día en el que un hombre, que se declaraba yihadista, atacó con un martillo a un policía, en la plazoleta que hay frente a la catedral de Notre Dame, en el centro de la capital francesa. En ninguno de los dos casos, por suerte para ella, resultó afectada.
Sin embargo, contrario a lo que se podría pensar, la mujer no quiere regresar a su casa todavía, sino que seguirá con sus vacaciones por Europa. Aseguró:
“Siento que me quiero quedar acá y no dejarlos, sean quienes sean (los responsables de los atentados), ganar”.
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