El ‘pecado’ de Spicer fue usar una corbata verde, que es un color ideal para hacer montajes. De hecho, en el cine es muy habitual que se reemplace ese color (aunque también el azul) con imágenes o videos. Así, el tono de la corbata, más la imaginación de los internautas (y una que otra herramienta tecnológica) dieron como resultado esto:

Spicer, sin embargo, no es la primera persona (y seguramente no será la última) que permite que la imaginación de la gente vuele a ese nivel. Ya le había pasado a la Reina Isabel del Reino Unido, que asistió a un desfile con un traje verde (casi fluorescente) y, olvidando el protocolo con la monarca, internet también ‘le pasó factura’.

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