Presuntamente, el hombre se ahogó durante la noche, pero las causas exactas del fallecimiento permanecen sin esclarecer, destaca el diario británico Independent.

Luego, dice el mismo diario, la viuda se enteró de que su marido había estado trabajando horas extras para ahorrar y así sorprenderla con unas vacaciones en Praga, República Checa, con motivo del aniversario de esta pareja de ciudadanos ingleses.

Esas horas de más que Mikey pasaba en la tienda de limpieza de tapetes y alfombras fueron precisamente la causa de la pelea la noche antes de su deceso, pues su mujer le reclamó por demorarse tanto.

Tan solo dos meses después, nació un romance entre la viuda (de 36 años) y Chris, el hermano de su fallecido esposo, quien le ayudó y acompañó a la mujer durante la elaboración del duelo por la pérdida de su marido.

El artículo continúa abajo

“Es extraño cómo de una tragedia puede surgir algo maravilloso. Chris y Ashley pasaron juntos por mucho dolor y su relación no cambia lo que cada uno sentía por Mikey”, le dijo una fuente cercana de la familia, que mantuvo en reserva su nombre, al diario The Sun.

El medio reseña que luego de la pelea que Ashley tuvo con su esposo la noche anterior, encontrarlo muerto y haberse enterado de la razón de la demora, la mujer se sintió culpable: “Aún me odio a mí misma porque las últimas palabras que le dije fueron producto de la rabia”, recuerda.

Mikey y Ashley tenían tres hijos; dice el medio, citando a la madre, que Chris es muy bueno con los niños.

Por supuesto, no se han hallado pruebas de que la mujer atentara contra la vida de su esposo, o que ya tuviera una relación con su cuñado mientras Mikey estaba con vida.

LO ÚLTIMO