Cuando lo vieron, el hombre estaba con las manos y los pies atados, y según la versión que ofreció en ese primer momento, fue raptado por unos sujetos de acento extranjero cuando estaba en el carro de su jefe. Dijo que lo habían encerrado por 5 días, en los cuales no le dieron comida, y que le pedían dinero, informa El País, de España.
Agentes de la policía se desplazaron hasta el lugar en el que estaba el hombre, que además de eso les dijo que lo habían amenazado con una pistola, lo agredieron, le pusieron una capucha y lo subieron a una camioneta. También aseguró que le habían robado el carro del jefe y después, supuestamente, lo llevaron a una habitación oscura, agrega ABC.
Las autoridades iniciaron una investigación, en la que tuvieron que hablar con las personas que vieron al hombre en el colegio, con la familia de él y con su jefe. Con eso, y con algunas contradicciones en las que cayó a la hora de hablar con los investigadores, su mentira se fue al suelo.
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Finalmente se pudo establecer que había pasado un fin de semana completo de fiesta, con drogas y alcohol. Además, el carro que supuestamente le habían robado, fue hallado cerca de uno de los bares en los que estuvo durante su larga parranda, agrega La Vanguardia.
Ahora, el hombre terminó arrestado y acusado como presunto autor de una simulación de delito. Qué guayabo.
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