Izaak Eglington-Watts y Emily Thompson paseaban por un bosque en la región de Plymouth, en el sur de Inglaterra, cuando de pronto el joven, que se había separado momentáneamente de su compañera, halló una vieja construcción con una entrada en arco y una reja, relata The Sun.

El artículo continúa abajo

Para oír su propia voz, el joven gritó en la puerta, pero lo que recibió, en lugar del eco, fue una llamada de auxilio de un hombre que llevaba atrapado allí muchos días y que, de no haber sido por la pareja de amigos y su ayuda, probablemente habría muerto, reporta el Irish Times.

El medio irlandés informa que la voz que provenía del agujero dentro de la estructura pertenecía a James Thompson, un hombre de 51 años que llevaba un mes desaparecido, pero que se había quedado atrapado allí desde hacía una o dos semanas, cuando entró buscando refugio luego de torcerse un tobillo.

Al principio, recoge The Sun, los jóvenes fueron a traer ayuda y se encontraron con una pareja que estaba trotando, pero ninguno de los cuatro quería aventurarse al fondo de la cámara, pues podría tratarse de un hombre peligroso, por lo cual hablaron con unos obreros que realizaban reparaciones en el puente y quienes llamaron a la policía.

Cuando lo rescataron, el hombre estaba en avanzado estado de deshidratación, al punto que las autoridades dijeron que no hubiera sobrevivido ni dos días más: “Tuvo mucha suerte de que los muchachos lo encontraran”, dijo un vocero de la policía citado por el medio.

El joven grabó este video de su conversación con el hombre atrapado.

LO ÚLTIMO