Comey no es muy popular entre los demócratas y seguidores de Hillary Clinton, pues el anuncio de que reabriría la investigación sobre los correos electrónicos de la entonces candidata presidencial, 10 días antes de las elecciones, para luego decir que no había encontrado nada, definitivamente ayudó a que Trump ganara la presidencia de su país, sostiene el diario estadounidense.

Por ello, a primera vista sorprende la salida del hombre de su cargo. Sin embargo, The New York Times se encarga de despejar la duda cuando afirma que pocos días antes de su salida, y probablemente sin saber que iba a ser despedido, el exdirector de la agencia solicitó un presupuesto mucho mayor y aumento del recurso humano con el fin de ahondar en la investigación sobre la posible injerencia del gobierno ruso en las pasadas elecciones presidenciales en EE. UU., dicen tres congresistas citados por el diario neoyorquino.

Por su parte, el editorial de este miércoles 10 de mayo del mismo diario afirma sin ambigüedades que esa fue la razón de la salida de Comey de la agencia, lo cual tiende un manto de duda sobre futuras investigaciones que se le hagan al presidente Trump sobre esta presunta relación con el gobierno ruso que, según el ‘Times’, de llegar a ser cierto sería un escándalo más grande que el de ‘Watergate’, que propició la renuncia del presidente Richard Nixon.

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El diario recuerda que cuando Comey hizo el anuncio de una nueva investigación contra Clinton, Trump fue el primero en felicitarlo porque le había recuperado la credibilidad al entonces candidato: “Se requieren muchos pantalones para hacer eso”, dijo en ese momento el hoy presidente.

El ‘Times’ no se come el cuento de que Trump sacó a Comey por su mal desempeño como director de la agencia, y por el contrario reitera que se debió a que “la investigación de Comey podría llevar a la destitución del presidente de EE. UU”.

El llamado de atención del rotativo gira alrededor del hecho de que el presidente de  Estados Unidos no está por encima de la ley, ni tiene derechos y deberes diferentes de los de cualquier ciudadano, y la decisión de despedir al director del FBI descalifica a esa agencia para que adelante una investigación objetiva sobre el caso de los rusos.

Es más, el New York Times duda que con la salida de Comey la investigación a la que tanto le teme el presidente continúe, más si se tiene en cuenta que será el mismo Trump quien escoja y nombre en su cargo al nuevo director del FBI.

La Casa Blanca, por su parte, rechazó este miércoles los reclamos para designar un fiscal especial para supervisar la investigación, mientras que Trump defendía a capa y espada su decisión de despedir a James Comey al frente de la policía federal.

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