A pesar de estar en ‘el ojo del huracán’, las autoridades rusas creen que Budeikin no es el único que está detrás del mencionado juego, y según BBC, están tras la pista de otras personas que podrían ser responsables de los llamados “grupos de la muerte”.
Budeikin se volvió famoso luego de decirle a la prensa rusa que sus víctimas no eran personas sino residuos biodegradables, y que su juego ayudaba a limpiar la sociedad, recuerda BBC. Además, respondió a los interrogantes de las autoridades diciendo que las personas que se suicidaron al jugar a la ‘Ballena Azul’ morían felices.
De igual manera, Budeikin había insistido varias veces que era inocente, que no tenía un plan malvado y que solo se estaba divirtiendo con eso.
BBC cita al periódico ruso Novaya Gazeta, que dice que Buideikin, como otros promotores, les pedían a los participantes que borraran toda la evidencia del reto de la ‘Ballena Azul’ en sus cuentas en redes sociales.
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Anton Breido, líder de la investigación, asegura que el joven creador sabía “muy claramente” qué era lo que debía hacer para conseguir los resultados que él quería, y que desde que creó el juego, en 2013, ha ido perfeccionando sus técnicas. Primero usaba la red social VK, en donde usaba videos para atemorizar a jóvenes, para luego atraer a los que más pudiera y aprovecharse de los que, según su criterio, se verían más afectados por una manipulación psicológica.
Según Mirror, el joven, lejos de ser odiado por las adolescentes, recibe cartas de amor en su celda, donde está permanentemente custodiado por guardias de seguridad.
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