Entre los cambios más importantes se destaca su capacidad: el aeropuerto de Bogotá pasará de atender 31 millones de pasajeros cada año a recibir 43 millones.
Según explicó Mauricio Ossa, presidente de Odinsa, citado por el diario Portafolio, también se abrirán más locales comerciales, salas VIP y nuevos espacios para parqueo; y ahora habrá 152 mostradores de check-in y 50 módulos para autocheck-in.
Así mismo, El Dorado estrenará locales en el Duty Free (libre de impuestos), varios de ellos reemplazarán al La Rivera y habrá una nueva empresa a cargo de la operación de este negocio.
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Desde marzo de este año se venía trabajando en las obras de expansión del aeropuerto. En esa época, el grupo Opaín, concesionaria de esta terminal aérea, informó que luego de las obras, El Dorado contará con 223.700 m2 y 41 posiciones.
“La ampliación de El Dorado responde a un proceso constante de crecimiento de la demanda del mercado. Es una de las obras de infraestructura icónicas de Colombia y es para nosotros, como operadores de la concesión un orgullo poner en servicio estas nuevas posiciones, que impactarán positivamente la conectividad y la experiencia de nuestros usuarios”, señaló en esa época Andrés Ortega, gerente general de Opaín, en el sitio web oficial del aeropuerto.
La nueva ‘cara’ la conocerán los colombianos desde este miércoles a las 6 de la tarde, luego de un evento de inauguración al que asistirá el presidente Santos.
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