En entrevista con Finanzas Personales, contó detalles de todo lo que rodeó el inicio de su negocio y lo difícil que fue comenzar. Una de ellas ocurrió cuando hasta ahora nacía la idea y a Moreno le tocó viajar a Sillicon Valley para tratar de conseguir financiación para su emprendimiento.

Según contó Moreno a ese portal, le tocó dormir durante 2 años en un sofá de un amigo que le dio posada en su apartamento en las noches, mientras en el día salía a visitar a los posibles inversores que lo apalancaran para alcanzar su meta: conseguir 20 mil dólares (cerca de 60 millones pesos colombianos al cambio actual) para sacar adelante su idea de negocio.

Open English inició en un apartamento con la idea de realizar clases de inglés de forma virtual y con bastante flexibilidad para los estudiantes. Tras trabajar con 22 programadores en un apartamento y quedarse con escasos 700 dólares, Moreno optó por viajar a Estados Unidos y buscar la financiación para un negocio que ya superó en 2013 los 125 millones de dólares de financiación, “récord de recursos para una empresa tecnológica latinoamericana”, afirma Finanzas Personales.

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Entre los pilares que tiene el venezolano para aplicar a su negocio se destaca la tecnología. Según contó el año pasado al diario La Nación, de Costa Rica, las herramientas virtuales no avanzan de forma lineal sino exponencial.

“Es decir, de pronto la gente tiene acceso a nuevos recursos. Las empresas deben aprovechar la tecnología como una plataforma para desarrollar su negocio y para abrir nuevas oportunidades de mercado”, señaló Moreno a La Nación.

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