Fue en el partido de ida de la semifinal del campeonato Paulista en el estadio Morumbi, donde el Sao Paulo ejerce de local.

Cuando el reloj bordaba los 39 minutos y el marcador iba 0-1 a favor del Corinthians, Jô, autor del único gol  hasta ese momento, fue sancionado con amarilla por un supuesto pisón sobre el arquero Renan Ribeiro.

En la jugada, el delantero había intentado ir por el balón, pero le fue impedido llegar por virtud del defensor Rodrigo Caio, quien a su vez, tuvo un contacto con su arquero, quien mostró dolor por el golpe.

El juez creyó que Jô fue quien había pisado al portero Ribeiro y por esa razón lo amonestó con amarilla. No obstante, en un gesto de juego limpio, Caio confesó que fue él quien tuvo el contacto con su compañero, por lo que la tarjeta era injusta.

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“No hice nada de más, sino lo que debía hacer”, dijo Caio al final del encuentro que terminó 0-2 en contra del Sao Paulo, registra Globo Esporte.

“Felicitaciones para Rodrigo Caio que tuvo una actitud de hombre”, reconoció Jo, mientras que el presidente del Corinthians, Roberto Andrade, afirmó que “esto enaltece el carácter. Todos sabían del carácter de Caio, no necesitaban de esto para conocerlo. El fútbol se engrandece con estas actitudes. No podemos olvidar al árbitro, que tuvo la humildad de retractarse y retirar la tarjeta”.

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