En su relato entregado el pasado miércoles al programa ‘En la jugada’, de RCN La Radio, el comunicador señaló que el escándalo se desató luego de que el futbolista Adolfo ‘El Trencito’ Valencia se hizo a los servicios de una trabajadora sexual prepago tras la celebración del título de la Superliga, en enero de este año.

Quevedo había dicho que Valencia supuestamente llamó a 2 compañeros de equipo para que hicieran parte de la actividad, al parecer bajo consentimiento con la prostituta, y después de que cada uno tuvo relaciones con ella, los futbolistas incumplieron con el pago. Se mencionó que el servicio tuvo un costo de 6 millones de pesos, pero al final los deportistas solo habrían cancelado 300 mil. Esto presuntamente motivó la denuncia de la mujer a las autoridades.

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Pero este viernes en El Espectador, el periodista lleva el caso a otro extremo. Afirma que la noche del 31 de enero (2 días después de la consecución del título), Santa Fe organizó una reunión en el Hotel Dann Carlton, donde habitualmente se concentra el cuadro ‘cardenal’ para sus partidos, con el fin de celebrar el campeonato.

Al parecer, posterior al festejo oficial, algunos jugadores siguieron la fiesta. Quevedo señala que según su investigación, la trabajadora sexual ya mencionada contó que “fueron varias chicas prepago a la fiesta y que ella aceptó tener relaciones con el jugador Carlos Mario Arboleda”. Este desmintió en La W Radio que hubiera estado en esa celebración.

Después de haber consumado la supuesta relación sexual con Arboleda, la mujer dice que bajó al salón del evento y allí otro jugador se le acercó a ella ofreciéndole 500 mil pesos por otro rato de placer. La prepago aceptó y en medio del acto habrían aparecido otros 6 jugadores en la puerta de la habitación pidiendo participar.

Ella estaba desnuda y les dijo que no, pero el futbolista que estaba con ella intervino para decir: “Háganle, aprovechen, menciona el relato de Quevedo.

Lo que sigue en el testimonio de la mujer lleva el caso a una presunta violación por parte de los futbolistas:

“Los jugadores se desnudaron y uno por uno tomaron a la mujer. “Me cogían fácil, como un muñeco, me volteaban de todas las formas (…) y cada uno lo hizo conmigo. Yo no quería, pero no me dejaban ir”

La historia agrega que la prostituta no solo perdió su ropa interior y una chaqueta, sino que el segundo jugador que le había ofrecido los 500 mil pesos no le pagó esa cifra. Esto motivó su denuncia a la Fiscalía, según El Espectador.

“Además de su indignación porque nunca estuvo de acuerdo con esas relaciones sexuales, le pidió a la Fiscalía que investigara, porque ella estaba muy adolorida de la vagina, el estómago y la pelvis”, añade el texto.

También dice el diario que no está en la capacidad de confirmar que haya existido el supuesto acuerdo económico entre las partes para callar es escándalo; no obstante, fuentes que el mismo medio cita del equipo de fútbol afirman que sí se pactó una confidencialidad que se pagó con los premios entregados a los jugadores por ganar la Superliga.

En contraste con lo anterior, el presidente de Independiente Santa Fe César Pastrana afirmó a La W que desconoce el caso porque nunca les llegó al club ninguna denuncia. Aquí la entrevista que se contradice en algunos aspectos con lo dicho por Carlos Arboleda, como por ejemplo, que el jugador afirmó que el directivo sí estuvo en la cena de celebración de la Superliga, algo que Pastrana negó:

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