Guillermo Sanguinetti dijo que a pesar de ya no ser el entrenador del equipo profesional, todavía pertenece a Santa Fe: “Estoy sin llegar a un acuerdo, estamos con temas que no hemos terminado de enfilar; así que me voy a quedar en Bogotá. Estoy a gusto en la ciudad, acá voy a planificar lo que va a ser mi futuro familiar y laboral”.

Por otra parte, aceptó que los resultados que obtuvo no fueron positivos y que el equipo falló a la hora de contratar jugadores que sustituyeran a aquellos que fueron transferidos y a los lesionados, sin embargo, aclaró que hubo mal ambiente a su alrededor.

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“Noté en el último partido [caída 0-1 de local ante el Tolima] que hubo cosas preparadas”, indicó haciendo referencia a pancartas, volantes y coros que pedían que se fuera.

Y explicó que le pareció particular la actitud de quienes querían que no continuara: “Entiendo que pueda haber disgusto por la forma en la que juega el equipo o que el hincha tenga un paladar para determinado fútbol. Pero el hincha siempre alienta para que su equipo gane, sin embargo vi otra predisposición. Tenían listas las cosas, esperaban que me fuera, uno se da cuenta”.

Gerardo Bedoya fue encargado de la plantilla albirroja mientras es contratado un técnico en propiedad.