Esta fue la jugada, a solo 120 segundos del final del tiempo extra, que tuvo la Roja con Arturo Vidal y luego con Martín Rodríguez. El palo y el travesaño postergaron la celebración chilena hasta la serie de penales donde salió figura el portero Claudio Bravo.

El partido en sus 90 minutos reglamentarios inició con opciones de parte y parte, tras las cuales fueron los arqueros los responsables de que el marcador no se abriera.

Rui Patricio logró anticiparse a un balón filtrado que iba para la definición de Eduardo Vargas, mientras tanto Claudio Bravo respondió a la exigencia que le mostró André Silva en el uno contra uno.

Después de estas chances, la posesión y profundidad en el primer tiempo fueron para Portugal, pero Chile logró defenderse bien y también atacó. Las opciones más claras La Roja llegaron en los pies y en la cabeza de Charles Aranguiz, que no estuvo fino a la hora de definir.

En el inicio del segundo tiempo, los australes mejoraron en la posesión y tomaron la iniciativa del partido. Por poco Vargas, de volea, abre la cuenta, pero Rui Patricio detuvo su intento.

La respuesta llegó con Cristiano Ronaldo con un fuerte tiro contenido por Bravo. En general, CR7 careció de contundencia en sus participaciones.

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El resto del tiempo reglamentario transcurrió sin mayores riesgos, con excepción de los últimos minutos donde el conjunto luso apretó el acelerador y exigió en defensa al cuadro chileno.

Los 30 minutos del alargue mostraron a Chile con más restos físicos que su rival. Esto se traduce en que por poco sentencia la semifinal en los últimos segundos con el doble postazo ya referenciado. Así se fue la definición a la serie de tiros desde el punto penal.

Finalmente Claudio Bravo atajó los penaltis de Quaresma, Joao Moutinho y Luis Nani, mientras Arturo Vidal, Charles Aranguiz y Alexis Sánchez marcaron los tantos de la Roja para su histórica clasificación a la final del campeonato donde espera por México o por Alemania.

Estas fueron las nóminas de ambos conjuntos:

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