“Esta carrera es buena para mí. Será fácil porque sabemos la ruta”, manifestó el joven en un taller de mecánica en Lima, donde le dan los últimos afinamientos al vehículo UTV que compartirá con su padre.

Los Barrón participan en la categoría SXS de la prueba motorizada más dura del mundo. 

Lucas explicó que su misión consistirá en estar al tanto de cualquier falla mecánica y al estado de la ruta.“Lo voy a ayudar a ver el motor, la ruta y los neumáticos”, afirmó el joven.

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Por su parte, el padre de lucas resaltó que no tuvo ningún problema con los organizadores del Dakar para inscribir a su hijo en la competencia.

El requisito fue el mismo que sigue cualquier competidor: pasar todos los exámenes médicos y contar con los documentos exigidos.

“Lucas ya tiene la licencia de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para participar en el Dakar”, agregó el padre.

“Las personas con síndrome de Down desarrollan ciertas capacidades. Lucas puede desarrollar cualquier deporte“, destacó con orgullo su padre.