La principal motivación que tuvo la familia hace un trimestre para planear tan largo viaje fue la idea de ver jugar a Neymar en vivo en el duelo ante Las Palmas por la liga española.
Lo que los australianos no sabían era que más o menos un mes después de haber adquirido los tiquetes aéreos y los hospedajes en la ciudad condal, el brasileño dejaba el Barcelona para unirse al PSG, club que pagó la cláusula de 222 millones de euros y anunció su fichaje el 3 de agosto.
Ya con todo listo, la familia emprendió la travesía de medio mundo para igualmente disfrutar de Lionel Messi, Luis Suárez y compañía. Para su desgracia, el destino tampoco les permitió hacerlo.
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Por cuestiones de seguridad, debido a los enfrentamientos que se presentaron a lo largo del día entre la policía y los ciudadanos durante el referéndum Catalán, la directiva del elenco ‘culé’ pidió a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) postergar el partido.
Sin embargo, el ente rector del fútbol en España se negó a esta solicitud y obligó a que se dispute el partido en el horario determinado inicialmente, pero sin la asistencia de público.
El jugar a puerta cerrada, fue explicado por Josep Maria Bartomeu, presidente del equipo, como una “crítica o disconformidad con lo que sucede” en la región.
Las valoraciones de Josep Maria Bartomeu sobre la excepcionalidad del #BarçaLasPalmas pic.twitter.com/pvbUQEtRaQ
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 1 de octubre de 2017
La familia deberá volver a su natal Australia, sin haber visto a Neymar, Messi, Suárez, tampoco la victoria 3-0 del Barza, y ni siquiera poner un pie dentro del Camp Nou.
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