5 momentos históricos de los ciclistas colombianos en el Giro de Italia

5 momentos históricos de los ciclistas colombianos en el Giro de Italia

‘Cochise’ y el comienzo de la gloria  

Desde 1973, los escarabajos han sido protagonistas ilustres en el Giro de Italia. Martín Emilio ‘Cochise’ Rodríguez fue el ganador de la etapa 15 del Giro de ese año entre Firenze y Forte dei Marni. Sacando esa berraquera que caracteriza a los colombianos, se impuso por escasos 3 segundos sobre un lote en el que venía el ganador de la carrera de ese año, el belga Eddy Merckx. Dos años más tarde, en 1975, salió vencedor de la etapa 19, entre Baselga di Pine y Pordenone.

En la imagen, el corredor antioqueño, del equipo Bianchi Campañolo, saluda al campeón de 1975, el italiano Fausto Bertoglio, quien luce la ‘maglia’ rosa. Rodríguez era célebre en el pelotón internacional del ciclismo para esa época, pues ya había ganado el mundial.

En la etapa 13 del Giro de Italia de 1989 (207 kilómetros entre Padua y las Tres cimas de Lavaredo), uno de los puertos más difíciles en los Dolomitas, nuestro escarabajo le sacó un minuto a Laurent Fignon, Andrew Hampsten y Erik Breukink y obtuvo así una victoria categórica que puso en alto el nombre de nuestro país.

Unos días más tarde, Herrera repitió triunfo. En esta ocasión se impuso en la cronoescalada que finalizó en la cima del monte Generoso. Herrera finalizó en la casilla 18 de la clasificación general, pero se enfundó la camiseta del mejor en la montaña y evidenció con creces que Colombia es tierra de escaladores.

Y en la etapa 9 del Giro de 1992, la llegada al mítico Terminillo llevó a Herrera a una nueva victoria de etapa en su mejor Giro, en el que finalizó octavo en la general. Además de estos triunfos en territorio itálico, cabe recordar que Herrera fue el primer colombiano en terminar como primero en la general de una de las 3 grandes vueltas cuando ganó la Vuelta a España en 1987.

El paisa logró la victoria de la décima etapa del Giro en 2013, disputada entre Ceordenons y Altopiano del Montasio. Luego, en la etapa 20, Fabio Duarte, ‘Rigo’ Urán y Carlos ‘Bananito’ Betancur llegaron en las posiciones 2, 3 y 4 de esta etapa, respectivamente. Así, Urán le ponía la guinda a su magnífica participación en el Giro de ese año y quedaba en la segunda posición de la general, así como el ‘Bananito’ se convertía en el nuevo campeón de los jóvenes.

Y en 2014, ‘Rigo’ repitió subcampeonato, una hazaña que quedará para siempre en la memoria de los colombianos.

En una polémica etapa (la 16), la organización neutralizó la carrera; sin embargo, Quintana adelantó a un grupo de ciclistas, entre los que estaba Rigoberto Urán y con esto logró descontarle tiempo al líder de la carrera, que precisamente era el antioqueño.

“Cabe decir que la diferencia en la última subida era abismal. Con el respeto a ‘Rigo’ y a los fans, no hubo trampa, ni amague de nada y tuve la fortuna de tener un buen día. Estuve a nada de retirarme… en el Stelvio, yo seguía la luz de la moto, yo no veía nada más”, le contó Nairo a Mario Sábato sobre esta polémica carrera.

A pesar de un comienzo complicado, y opacado por una bronquitis, el boyacense logró vestirse con la ‘maglia’ rosa el último día de carrera, dejando en segundo lugar de la general a ‘Rigo’, y entre los dos pusieron a Colombia como el gran dominador del Giro en ese año. 

“Es uno de los días más felices de mi vida, no lo puedo explicar”, declaró el ciclista el primero de junio del 2014, cuando se coronó campeón con 24 años y confirmó las expectativas que había alrededor suyo. Además, se convirtió en el primer sudamericano en ganar un Giro y el segundo colombiano en ganar una de las tres vueltas más importantes del circuito ciclístico. 

La etapa 14 de la versión 2016 del Giro tenía esa distinción por ser una de las más complicadas de la competencia. A pesar de que el también colombiano Darwin Atapuma se perfilaba como el ganador, Chaves logró el triunfo en los últimos metros. Así, se ubicaba de tercero en la general y esa fue la cuota inicial de su histórico subcampeonato. 

En la penúltima etapa, ‘Chavito, había alcanzado el liderato, aventajando a Vincenzo Nibali por 41 segundos. No obstante, el italiano terminó siendo el ganador del Giro tras finalizar la última etapa. "No he tenido las piernas como Vincenzo, eso es todo. Así es la vida. No se ha perdido más que una carrera de bicicletas y me marcharé contento a mi casa. Ha sido una carrera de 80 horas y 3.000 kilómetros y no hay que poner excusas", concluyó Chaves en ese momento.

Después de años de que Colombia se destacara con los escaladores, el domingo 7 de mayo del 2017 un velocista colombiano logró alzar sus brazos en un embalaje del Giro. Era la tercera etapa de Fernando Gaviria en su primera carrera de 3 semanas, y después de 2 días difíciles, tuvo las piernas para imponer su potencia y velocidad en los últimos metros de la llegada a Cagliari. 

Esa victoria le permitió, además, convertirse en el cuarto colombiano que vestía la ‘maglia’ rosada de líder del Giro. Antes lo habían logrado Nairo Quintana, Rigoberto Urán y Esteban Chaves. Pero como si ya no fuera suficiente, ganó 3 etapas más que lo hicieron acreedor a la camiseta ‘ciclamino’ de los puntos. Semejante aparición lo puso en las primeras planas de los medios internaciones y sorprendió a propios y extraños.

Dos años después, en la versión 2019 del Giro, ganó la tercera etapa y se puso la ‘maglia’ ‘ciclamino’ de nuevo en la siguiente, pero abandonó la carrera después de la séptima etapa.

Teniendo en cuenta aspectos como la humedad, condiciones climáticas e intensidad del ejercicio, el ciclista puede perder entre 500 y 1000 ml de fluidos por hora y debe reponer el 75 % de estos por medio de una adecuada hidratación con el balance óptimo de agua y electrolitos, explica la Real Federación Española de Ciclismo. Esto explica la importancia del balance entre el agua y los electrolitos, debido a que se puede sobrevivir a pérdidas de hasta el 40% de grasa, carbohidratos y proteína, pero no de agua.

  • Permite una correcta lubricación del cuerpo, evitando lesiones.
  • Acelera y fortalece el proceso de eliminación de toxinas e impurezas.
  • Activa las enzimas esenciales para brindarle la energía necesaria a todo el cuerpo.
  • Ayuda a la eficacia al momento de transportar nutrientes.

Es importante consumir de 100ml a 200ml de líquido en periodos cortos, como por ejemplo cada 15 o 20 minutos, debido a que parte de una correcta hidratación durante el ejercicio no se trata de consumir grandes cantidades de agua justo después de sentir sed; este tipo de manifestaciones pueden tener un efecto retardado, indicándonos que necesitamos rehidratarnos cuando ya perdimos considerables cantidades de líquidos y electrolitos. Por eso es recomendable tomar pequeños sorbos de sueros de rehidratación durante la actividad física, ya que esto ayuda a obtener un mejor rendimiento físico. 

Y, seguro, nuestros escarabajos han tenido muy presente la hidratación en sus carreras y sus buenos resultados han saltado a la vista durante años.

Sigue leyendo Sigue leyendo
imagen Usamos "Cookies" propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad personalizada. Si continúa navegando acepta su uso. Más información aquí