La región llegó este jueves a 228.751 muertos y a 5’826.336 contagios de coronavirus, de acuerdo con el recuento que hace la agencia AFP.
Lo grave es que, según las cuentas de esta agencia, cinco países latinoamericanos se encuentran además entre los diez más afectados del planeta: Brasil (segundo, con 3’224.876 casos y 105.463 muertos), Perú (séptimo), México (octavo), Colombia (noveno) y Chile (décimo). Estados Unidos continúa siendo el país más golpeado, con 166.038 muertos y 5’197.748 casos.
Frente a esta perspectiva que pone a Colombia entre los 10 países más afectados, el presidente Iván Duque había explicado en Noticias Caracol que “las cifras agregadas dicen poco” y destacó que los epidemiólogos e infectólogos con los que ha trabajado el Gobierno, lo mismo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), “siempre hablan de la proporción por millón”.
“Colombia tiene 50 millones de habitantes, y Colombia siempre va a tener más casos, por ejemplo, que Panamá o que Perú, solamente por el hecho de la población”, precisó el mandatario. “Pero cuando se miran las cifras por millón de habitantes, Colombia no está en el puesto 10. Inclusive Colombia está en una mejor posición. Usted la compara con Francia, con Inglaterra, con Italia, con España, con Perú, con Chile, con México, con Panamá… Eso muestra que el país ha tenido un desempeño que es positivo en comparación”.
“Diferenciemos a Colombia también de los países europeos, que tuvieron que salir a hacer pruebas de manera dramática ya cuando tenían colapsadas las unidades de cuidados intensivos. Aquí nosotros hemos ido aumentando la capacidad de pruebas, la capacidad de laboratorios, y el país está muy próximo a llegar a los dos millones de pruebas PCR, que son altamente confiables”, añadió el mandatario, y destacó que “Colombia tiene una letalidad baja del 3,4 %”.
En todo caso, Colombia superó los 14.000 muertos, según el balance oficial divulgado este jueves. El ministerio de Salud informó de 308 fallecimientos más, lo que sitúa la cifra de decesos en 14.145 en estos cinco meses de emergencia sanitaria.
De acuerdo con las autoridades, el informe no refleja el número de muertos en las últimas 24 horas, sino que recoge datos de los últimos 10 días. Con 50 millones de habitantes, Colombia suma 433.805 contagios y es el cuarto país con más casos y muertos en Latinoamérica.
El lunes pasado se había superado la barrera de los 13.000 decesos, y tres días después ya se registran más de 1.000 fallecidos adicionales. Bogotá es el mayor foco de infección. Concentra el 34,6 % del total de casos en el país, en una población de 8 millones de habitantes.
Por eso, la alcaldesa de la capital, Claudia López, prolongó este jueves el aislamiento focalizado en varias zonas de la ciudad, que rige desde el 13 de julio y que se extenderá una semana más, hasta el 30 de agosto. A partir del domingo, 1’280.000 personas entrarán en cuarentena estricta en Bogotá, en un intento por frenar la velocidad de contagio y evitar un colapso de la red de cuidados intensivos.
En general, en América Latina las malas noticias se multiplican. México suma 505.293 casos de COVID-19 confirmados y 55.293 fallecidos a causa de la epidemia. Pero la cara de la pandemia en este país, de 128,9 millones de habitantes, sería aún más dura.
“Hay una visión muy acotada de la verdadera dimensión de la epidemia. Es verdaderamente difícil medir el contagio por el bajo número de pruebas” que hace el país, dijo a la AFP Malaquías López, epidemiólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y exdirectivo de la secretaría de Salud.
Al sur, Perú también sobrepasó la barrera del medio millón de contagios que se duplicaron al pasar de 3.300 diarios a inicios de julio a 7.025 en la última semana, según cifras oficiales, alcanzando este jueves los 507.996 casos confirmados.
Pese a la escalada de casos, la región vio una luz de esperanza. El miércoles se anunció que Argentina y México producirán y distribuirán una futura vacuna. Los dos países producirán millones de dosis para la región, a excepción de Brasil, de la futura vacuna desarrollada por la alianza de la Universidad de Oxford con el laboratorio AstraZeneca.
La posible vacuna, que se encuentra en etapa de ensayos clínicos, estaría disponible el primer semestre de 2021.
En Brasil, que tiene sus propios acuerdos sobre posibles vacunas, el estado de Paraná (sur) firmó el miércoles un entendimiento con Rusia para probar y producir la Sputnik V, vista con escepticismo por la comunidad internacional.
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