El labrador retriever, se caracteriza por su sociabilidad, buen carácter y por ser un perro bastante activo y juguetón, lo que lo convierte en una de las razas favoritas en el mundo. Sin embargo, tiene un problema: su tendencia a sufrir de sobrepeso.

Científicos de la Universidad de Cambridge descubrieron un gen asociado con la obesidad en los perros labradores. “Encontramos un dato común en una cuarta parte de los perros labradores que vincula a una razón biológica su obsesión por la comida”, indicó Eleanor Raffan, veterinaria y genetista.

Se trata del gen denominado como POMC, que fue identificado en un grupo de labradores, de los que 15 eran obesos.

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“En los ejemplares obesos de daba el hecho de que tenían una sección de ADN codificada al final de ese gen, lo cual dificulta la producción de una sustancia química en el cerebro que cumple la función de avisar al cuerpo que ya no tiene hambre después de una comida”, explica Muy Interesante.

Aunque cada perro tiene una dimensión diferente, un labrador macho debería pesar entre 27 Kg y 34 Kg, mientras que las hembras deberían mantenerse entre los 25 Kg y 32 Kg, de acuerdo con el portal Perrolabrador.net.

El sobrepeso disminuye la esperanza de vida de los animales, les trae problemas de movilidad y los hace propensos a sufrir de enfermedades cardíacas, cáncer y diabetes.

Para controlar su peso, se recomienda jugar con ellos una hora al día o dar paseos, que ayudan a estimular sus sistemas cardiovascular y digestivo. Se recomida evitar darles bocadillos y comida para humanos.