Cuando el café es tostado, libera gran cantidad de dióxido de carbono, pero este gas perdura en los granos durante al menos 2 semanas más. Por eso, es importante que el empaque tenga un orificio que permita liberarlos y evitar que la calidad del producto se afecte, informó Huffington Post.

Si estos gases no se liberan correctamente, la bolsa se inflaría, además, la humedad y otros elementos pueden alterar el olor y el sabor del café.

También le puede interesar:

El orificio permite que se libere el gas y evita que entre oxígeno y humedad hasta por 4 meses, manteniendo el café lo más fresco posible para preparar la mejor taza de café.

LO ÚLTIMO