Megan Kelley, de Chicago, Illinois (EE. UU.), divulgó en YouTube un video de su madre utilizando el aparato, mientras esperaban a que su padre fuera llevado a la sala de cirugías, donde le harían un doble trasplante de órganos. Al principio, la mujer reconoció que la montaña rusa virtual era “impresionante”, pero cuando la máquina empezó su recorrido, al parecer, ella se asustó: se recostó varias veces contra la pared, se deslizó de la silla en la que estaba sentada y gritó constantemente “¡Dios mío!”.

A los casi 3 minutos de usar el dispositivo, la señora se lo quitó, y en su cara se pudo notar que el viaje, aparentemente, no le gustó, pues estaba muy seria. Luego, empezó a echarse aire con las manos y, como no fue suficiente, abrió la puerta de la sala.

Sin embargo, su reacción de temor divirtió a sus hijos y a las personas que los acompañaban, pues no paraban de reírse al verla.

Se desconoce si el trasplante, que el hombre esperaba desde hace un mes en la unidad de cuidados intensivos del hospital, fue un éxito.

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