La sexóloga Ana Carmona le dijo al portal La Sexología que este problema normalmente se presenta por relaciones sexuales insatisfactorias, dolor durante el actor sexual o dificultades con la rutina que bloquean el deseo.

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El estrés, las crisis amorosas, los duelos, los partos recientes o los primeros años de crianza son algunos de los factores que juegan en contra del deseo sexual, añadió la experta.

Como mencionó el portal, esta condición se puede dar en cualquier momento y su fuente radica en la mente, no en el cuerpo. Pero si el problema persiste después de superar estas circunstancias, es importante visitar a un médico.

Por otro lado, es clave tener en cuenta que el sentimiento de culpa aumenta esta condición; aquí es donde la comunicación en pareja será de gran ayuda, pues todo es un proceso y se deben buscar soluciones que beneficien el vínculo amoroso, de lo contrario la culpa puede terminar desarrollando crisis de ansiedad, aseveró Carmona.

Según la sexóloga, la falta de libido no siempre es sinónimo de falta de amor o atracción; lo primero aquí es identificar el factor que puede estar generando este inconveniente. Además, es muy importante que la persona no se obligue a tener relaciones sexuales, ya que esto lo único que hace es empeorar la situación.