Para la mujer fue muy difícil conseguir un trabajo luego de haberse graduado como profesora de prescolar en la ciudad de Córdoba, Argentina, pues cinco años después pudo ingresar como docente al jardín Capullitos, en Villa Cornú, señala RT.

En esta escuela dicta la clase de estimulación temprana a la lectura, una asignatura especial en la que lee cuentos, además da clases de dibujo y hace actividades con música, a los 170 alumnos que tiene a cargo.

Garella señala que hoy es feliz y que tiene una muy buena relación con los pequeños y con la directora del jardín. Sin embargo, recuerda los rechazos y comentarios que alguna vez le hicieron.

Aquí, señores, monstruos no; síndromes de Down, no”, dijo una vez una directora del jardín a los padres.

La rectora de la institución Susana Zerdan resalta que ‘La Noe’, como la llaman sus estudiantes, ha sido una “experiencia única para el equipo”. Además, varios padres resaltan que fue una gran idea para los chicos.

Con información de AFP

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