La familia que reside en el lugar calificó el inusual nacimiento, ocurrido en un nido que había construido su madre, como un “milagro de Navidad”, reportó Reuters, citado por Mirror Online.

Re Braga, la dueña del árbol, contó que no esperaba que en este nacieran los pichones, ya que su madre puso los huevos y los dejó solos en varias ocasiones.

Los pájaros aún no se han ido de su vivienda y, según ella, tienen “pereza” de marcharse.

Conozca más sobre esta historia en este video divulgado por Cimacast: