De acuerdo con Ser Padres, muchas mujeres pueden sentir placer cuando alimentan a su hijo, e incluso algunas pueden alcanzar el orgasmo. Esta es una respuesta fisiológica del cuerpo femenino, por lo tanto no debe ser objeto de escándalos.

Por su gran número de terminaciones nerviosas, los pezones generan un gran placer. Su forma y aspecto atrae tanto a hombres como mujeres y por lo general siempre son incluidos en todo tipo de prácticas eróticas.

Además de lamer, chupar y masajear, el amamantamiento a la pareja es una práctica habitual que realizan algunas parejas, sin embargo, ha sido considerada como una parafilia, es decir una ‘desviación diferente a la norma’.

Expertos opinan que es una experiencia que favorece el disfrute, el deseo y la pasión. Además afirman que puede generar un gran lazo de intimidad. Cada pareja debe decidir si está interesada en experimentarla.

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