Se trata del primer burdel de muñecas sexuales de Escocia, informó Daily Record.

Ese medio también señaló que el primer negocio de este tipo que se creó en Europa, que tuvo sede en Barcelona, fracasó apenas un mes después de su apertura.

Sin embargo, Crawford manifestó que confía que su muñeca llamada Faith será un éxito. “Los vecinos no estarán contentos, pero espero que mientras el entorno que estoy creando sea seguro y legal, lo comprendan”, añadió.

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Los servicios se solicitan por internet y posteriormente Crawford invita al cliente a su casa en una hora acordada entre las 9 a.m. y las 9 p.m. y cobra 60 libras esterlinas (aproximadamente 240.000 pesos).

La muñeca había tenido un costo de 1.800 libras esterlinas (más de 7 millones de pesos).

El joven dice que ha tenido alrededor de 50 consultas, en su mayoría de hombres mayores de 30 años, y reveló que sueña con invertir en robots sexuales y expandir su negocio, informó Daily Mail.

No obstante, el medio británico aclaró que Crawford ha tenido problemas con su empresa. Los bancos no le permitieron abrir una cuenta comercial y Facebook y Twitter eliminaron sus anuncios.