Debido a esa conexión tan fuerte con los caballos, el hogar de caridad donde vivía, ubicado en North Devon, decidió sorprenderlo y cumplirle su último deseo, informó Huffington Post.
Agregó que el día de la visita, Patrick no tuvo la fuerza necesaria para levantarse y salir a encontrarse con el caballo, por lo que el personal del lugar cargó al hombre, con cama incluida, y lo llevó hasta la calle. Allí, alimentó al animal con un puñado de manzanas y zanahorias.
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“Cuando me dijeron que un caballo venía a visitar a papá, pensé que tal vez podría verlo desde su balcón. No tenía ni idea de que podría acercarse tanto”, aseguró a ese medio Jayne, hija de Patrick.
Según ella, ese momento siempre lo recordará.
El portal inglés indicó que Patrick murió tres días después de cumplir su último deseo, el cual fue una realidad gracias a un centro de rescate equino que prestó uno de sus caballos.
Cathy Whattingham, una enfermera que cuidó a Patrick ese día, aseguró que nunca olvidará la sonrisa de ese hombre al acariciar al caballo. “Se podía ver que tenían una conexión real”, concluyó.
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